Una historia dulce que nació en 1958
Corrían los primeros años ‘50 cuando en Cesena, en Romagna, Attilio Babbi inicia con pasión, junto a su hijo Giulio, la propia actividad de productor de conos y barquillos para maestros heladeros de la zona.
La actividad obtiene enseguida un gran éxito y, tras haber dado vida algunos años después a los primeros ingredientes para helado, en 1958 el abuelo Attilio realiza su sueño: el de crear el “dulce perfecto”, un dulce que regale una experiencia de gusto inolvidable. Fue así que nacieron los Viennesi y los Waferini, seguidos a través del tiempo de otras delicias, amadas desde el inicio en Italia y en el resto del Mundo por su inimitable barquillo.
A Attilio todavía le queda un “sueño dorado”: el de realizar no solo un pastel perfecto sino también un snack, una merienda, práctica, apetitosa y nutritiva para saborear cada día. En estos últimos años varias veces nos hemos planteado esta idea con la intención de continuar el estudio de esta merienda a la cual el abuelo Attilio hasta el nombre le había dado: ¡Waferone!
El WAFERONE – Receta de Attilio, ya no es un sueño dorado o un nombre inventado: a partir de esta temporada se ha vuelto una certeza, un nuevo producto para contar entre las especialidades pasteleras BABBI, para regalar a quienquiera que lo consuma, una experiencia exquisitamente perfecta, una “dulce banda sonora” que acompaña los momentos bellos que nos regala la vida.
